El mes de julio este año nos ha dado un auténtico regalo, arrancando con unas temperaturas muy agradables. Tuvimos la primera semana del mes temperaturas máximas normales, incluso por debajo de los valores medios que corresponden a estas fechas. Sobre todo fueron los valores mínimos los que supusieron toda una sorpresa, cuando en comunidades del norte de la península amanecieron con termómetros marcando los 3 y 6 grados centígrados. Especialmente destacables las mínimas de Pamplona, Soria y Huesca que obligaron a coger la chaqueta a muchos esos primeros días de julio. Las fiestas de los San Fermines en Pamplona han transcurrido bajo un panorama estable, con un ascenso marcado de las temperaturas, algo que muchos sin duda han agradecido.

Ya superada en el calendario la primera quincena, nos encontramos en estos momentos sumergidos en los rigores del verano con valores térmicos menos llevaderos. En Extremadura y Andalucía occidental, donde de momento los valores máximos registrados no habían sido extraordinarios, ahora es cuando tienen aquí que replegarse y aceptar que lo de antes era todo un regalo.

En plena canícula - GFS

Las previsiones meteorológicas nos indican que el panorama que nos espera de cara a los próximos días corresponderá plenamente a los extremos  de la estación estival. A día de hoy estamos a la espera de lo que haga una pequeña baja en superficie, acompañada de aire más fresco en altura, que se descuelga desde el norte, desde Groenlandia. La trayectoria que ésta sigue, posicionándose frente a las costas de Portugal, podría hacernos pensar que el ambiente se inestabilizaría la próxima semana con un alivio térmico en gran parte del país. Pero comprobando la actualización de los modelos de predicción podemos observar como, lejos de nuestro interés en un próximo alivio de temperaturas, la baja se quedará “aparcada” unos días en el litoral portugués permitiendo que nos quedemos “bajo” una dorsal de aire muy cálido. Esta posición provocará que los mercurios de los termómetros asciendan incontroladamente en la mayoría de las comunidades, pudiendo alcanzar valores récord. No se descarta, aunque habrá que estar pendiente de las próximas actualizaciones, que al menos la actividad convectiva con las tormentas alivien ligeramente.

De todas formas, refiriéndonos al título de este post, ahora nos encontramos en el intervalo del año en el que se alcanzan las temperaturas más altas: la canícula, desde el 15 julio al 15 de agosto. Sólo nos queda confiar que en el mes de agosto con días más cortos regrese el ambiente algo más fresco. Así que imprescindible un poco de paciencia.