Trastorno para todos los que ya han guardado la ropa de abrigo, porque las temperaturas se desploman en los próximos días.

Aunque muchos no se lo crean, lo que tendremos en las próximas 72 horas será un panorama más que invernal en muchas comunidades. Todo se lo debemos a una borrasca que ya se aproxima desde el norte de África, acompañada de un importante embolsamiento de aire frío en capas altas. Durante la tarde de este miércoles, ya las nubes han ganado protagonismo en Alicante, Murcia, Almería y de forma considerable en las Islas Baleares.

A partir de ahora las lluvias se van a repartir, además de forma importante, por todas las Comunidades Levantinas. Tendremos que estar muy atentos a todo el sudeste peninsular, donde los chubascos tormentosos fácilmente pueden dejar los 80 litros por metro cuadrado en 12 horas. No nos olvidemos del viento, porque seguirá soplando con rachas fuertes del nordeste. Otro factor a considerar es la situación marítima, que se mantendrá muy alterada en toda la vertiente mediterránea con olas que pueden alcanzar los 2 metros de altura.

Lo peor de todo es que la inestabilidad se adueñará el viernes de toda la península. En Galicia y el litoral cantábrico, donde estaban disfrutando del sol e increíbles temperaturas de 25 grados, también les llega la mala noticia. Según apuntan los mapas y los modelos de predicción los cielos se cubrirán y las precipitaciones empezarán a ser frecuentes.

No queda todo aquí, porque añadimos lo que muchos no se creen y es que el copo blanco también nos visitará en los últimos días del mes de abril. La cota de nieve acabará quedando en los 900-1500 metros en la mitad norte el viernes.

Muchos preguntaban esta mañana si podían creerse lo que habían oído de los cambios drásticos en el tiempo o quizá exagerábamos nosotros. Son los rigores de la primavera los que nos obligan a recordar aquello de: “hasta el cuarenta de mayo no te quites el sayo”. No estamos hablando de nada extraño y posiblemente la falta de memoria meteorológica hace que muchos se alteren innecesariamente.

Para los que están pendientes del puente de mayo, simplemente comentarles que es complicado aventurarse a confirmar una previsión.